La leyenda de las grullas de origami
En Japón, la grulla es un símbolo de longevidad y buena fortuna. Seguramente por eso, es una de las figuras de origami más populares. También se cree que el poder de una grulla de papel va más allá de la magia estética de transformar una cuartilla en la figura de papiroflexia más emblemática que existe.
Según la leyenda del Senbazuru, se concede un deseo a quien hace mil grullas de papel. De hecho, Senbazuru significa literalmente "mil grullas".
Esta leyenda se popularizó a través de la historia de Sadako Sasaki, una niña que contrajo leucemia a raíz de la explosión nuclear de Hiroshima de 1945. Cuando tenía doce años, se propuso hacer mil grullas de papel para que se concediera el deseo de recuperarse de su enfermedad. Su historia se hizo famosa en Japón y, desde entonces, las grullas de origami son un símbolo de deseos de curación, mensajes de paz y esperanza en todo el país. En Hiroshima, incluso hay un edificio bautizado con el nombre de "grulla de papel".